Demonios

Os presento a uno de mis demonios: el miedo.

Sinceramente, pienso que desde hace tiempo estoy perdiendo mucha vida. Que me paso la mayor parte de ella (si no es casi al cien por cien) pensando y adelantándome a las supuestas consecuencias (muchas de ellas negativas) a las que llegaré si hago o dejo de hacer, a no hacer o hacer por miedo, por MIS miedos: a volar en avión (es pánico), a conducir (porque igual tengo un accidente), a ser madre (por el parto), y así muchas más cosas….

He llegado a la conclusión gracias a este Máster que estamos cursando actualmente, que lo que tengo es un miedo inventado por mí en la mayoría de los casos, pues todo lo que pienso está solamente en mi cabeza y al final me acabo creyendo que pasará lo que mi mente piensa y eso hace que al final no dé ese paso.  Esto me lleva a una limitación en mi vida que considero absurda a la vez que seria. ABSURDA porque los miedos son inventados por mí y SERIA porque si esto sigue, no podré llegar a tener nunca una vida plena y satisfactoria y siempre estaré arrepentida de las cosas que no he hecho o he dejado de hacer por ello. Con lo que supondría un grave problema.

Porque a consecuencia de mi MIEDO no soy capaz de “volar”, de brillar, de florecer, de avanzar en mi vida sobre todo a nivel laboral y lo que es más importante, a creer en MI.

Es fundamental creer en TI y no me da vergüenza sincerarme con todos vosotros diciendo que muchas veces me he preguntado como creer en TI mismo cuando llevas a un demonio dentro de ti diciéndote todo el santo día: no hagas esto, no hagas lo otro, haz esto, haz lo otro…si no lo haces te pasarán cosas horribles, bla,bla,bla… Porque es eso, que si me paro a pensarlo detenidamente y con la mente fría solo me dice: bla bla bla… y eso no significa nada porque en realidad solo son demonios, y los demonios no existen, solo están en nuestras cabezas impidiéndonos seguir con nuestra vida.

Reconozco que no he tenido consciencia de todo ello hasta hace relativamente poco. Sabía que tenía miedos y que vivían conmigo, pero no le daba importancia. Ahora sí se los doy. Cuando digo ahora es hace unos días gracias a que me están abriendo los ojos y estoy despertando.

Estoy despertando despacio, es verdad y no os voy a mentir, ahora soy consciente de ello y sé que tengo un largo camino por recorrer para eliminarlos de mi yo interno. Que tengo un largo trabajo conmigo misma y que debo enfrentarme a ellos. Digo ellos, porque dentro de mí, habitan varios demonios que me impiden crecer ya que, a consecuencia del miedo, tengo a la inseguridad emocional a flor de piel. Sale muy a menudo esa sensación de inestabilidad y vulnerabilidad. La autoestima es el tercer demonio unido al resto. Todos ellos comparten una conexión muy importante y es el desencadenante una de la otra. La confianza en ti, el respeto y el quererse a uno mismo son los pilares fundamentales para conseguir tener una buena autoestima y que los demonios desaparezcan.

Hace unas semanas en una reunión que tuve con un experto en I.Emocional, descubrí que no me conozco a mí misma. Me acuerdo que ese día me vine muy abajo y me puse a llorar. La verdad que es un poco triste saber que no te conoces. Ahora mismo y después de darle vueltas a ello, me siento contenta por haber tenido aquella reunión que me abriera los ojos para darme cuenta de cosas que antes no tenía consciencia y así poder ponerlas solución.

La gran pregunta para mi es ¿Cómo me conozco a mí misma? ¿Cómo llegar a creer en TI? ¿por dónde empezar?

Sé cuál es el camino y sé que lo conseguiré: no ponerme límites ni obstáculos innecesarios ni excusas que hagan que me reprima y no dé ese paso tan necesario, vital e importante para llegar a ser quien quiero ser. Empezar a vivir mi vida como merezco y fluir. Me costará porque salir de tu zona de confort es complicado, pero nada imposible y por supuesto que merecerá la pena porque el resultado será positivo para mí y llegaré a ser la persona que siempre quise ser.

Cristina San Frutos 12/2021

Comparte esta historia en tus redes!!!